criar, cocinar, curiosear, compartir...y claro, hablar de ello

domingo, julio 01, 2007

ORGULLO (o raros somos todos)

Iba a titular Europa Pride, pero es tan odioso eso de hablar tooodo en ingles... este país que llevaba años a salvo de ese vicio, finalmente ha sucumbido. Tal vez recordar a manos de quién perdieron Cuba a principios del siglo pasado, o simplemente la reciente foto de las Azores ayudaría a contrarrestar este mal lingüístico que, además, suena fatal en una lengua que pronuncia tan cómicamente la x...
En fin que la palabra orgullo es suficientemente bella y enérgica para enmarcar mi comentario, porque ayer un año más, inevitablemente terminé tirándome a la calle hasta la madrugada para ver pasar carrozas disparmente producidas y a codearme con hordas de heterosexuales como yo que compartíamos la fiesta del orgullo gay mas que nada porque es de las mejores del año. Sí, que también es por solidaridad, por recordar que a la lucha por la igualdad le queda mucho camino, pero este día por sobre todo celebramos una fiesta para disfrutar de lo normales y divertidas que son las sociedades donde los y las homosexuales viven y comparten su forma de ver el mundo con el resto del personal.
Sinceramente, me pareció que este año estuvo excesivamente glamoroso; vamos, que el sello de encuentro europeo trato de subirle el pelo pero sólo logró que se notara que había gente que cobraba por estar exhibiendose impúdica y candorosamente por la Gran Vía de Madrid. Personalmente me gustan más las carrozas curradas entre la gente y cuando son temáticas mejor aun y este año se echaron de menos. Eso sí, ha quedado en evidencia cual es el estilo gay masculino que se lleva: ni un solo pelo por ninguna parte (comprobado lo de ninguna parte) y mucha marca muscular, pero en su justa medida. Todos igualitos la verdad. Hasta que aperecen los osos y lo cambian todo; aquí es cuando una recuerda que esta gente (la que está en las carrozas) toma el metro por la mañana, se va de cañas y pelea con su pareja igual que todo hijo de vecino. Si nadie ha visto la peli Cachorro de Miguel Albadalejo, que la vea y aprenda que también en el mundo gay hay de todo.
Eché de menos a las chicas. Supongo que salir del armario es duro pero cuando la sociedad acepta que tu vida sexual sea pública (batallitas, machadas típicas y otras expresiones de masculinidad machista) es menos complicado. Pero si además tienes que aguantar que siendo gay también eres chica y las chicas no hablan de lo que tienen entre las piernas (menos de lo que hacen con ello), cambia el cuento. Es cierto que tanto como está de moda lo homosexual, están de moda las chicas devoradoras, que llevan al batuta, que pueden con todo, pero como es fantasia que el mundo gay es puro glamur y hedonismo, lo es también que la sexualidad plena, como expresión de igualdad de género, sea ya una conquista en nuestras vidas.
Para cerrar y no aburrir al paciente lector, comentar que en mi cabeza estuvieron los pocos amigos homosexuales con los que cuento, deseando que todos tengan alguna vez el placer de asistir a esta fiesta por todo lo alto. Puedo dar fe que en Madrid la movida gay es de muy buen nivel, se pasa de lujo y desde mi punto de vista lo mejor, es que puede compartirse con los heteros que siempre estamos disponibles para irnos de marcha por Chueca, pero el día del Orgullo es incomparable y por lo que he visto y oido, lejos de lo mejor de Europa, salvando Berlín supongo, pero ahí tienen la costumbre de hablar alemán y se complica un poco la experiencia...
Esto sería por hoy. A ver si es cierto y puedo hacer una entrada semanal al menos. Y no es por no tener cosas que decir dando vueltas, incluso medio enmpezadas en la cabeza, pero es que la vida pasa muy de prisa y siempre cuesta sentarse a escribir. Ya lo decia Pasteur, aquello de los gramos de inspiración necesarios para crear, infinitamente menores que los de sudor...
Se les quiere y se les espera (los post, claro)
Besos

1 comentario:

Mumú dijo...

...Y a mi me parece que escribes tan bien...de lo que sea...sigue, porfa